Las grandes marcas (y muchas pequeñas también!) saben de lo que hablo cuando me refiero al márqueting sensorial en el punto de venta. Todas aquellas acciones que nos ayudan a enriquecer la experiencia del cliente externo, factores como la música, una iluminación adecuada, una colocación cuidada del producto, el olor al entrar en el establecimiento, etc. Aquellos elementos que percibimos a través de los sentidos, que realzan el producto y que también se utilizan como anclaje, para que el cliente, entre en la delegación que entre y en cualquier parte del mundo, identifique perfectamente la marca en cuestión.
El Talento está de moda. Las empresas, el deporte, la educación, la política, etc. Todos necesitan talento. Incluso tenemos a los “headhunters” o “cazatalentos”, para encontrarlo.
Es curioso. Seria interesante saber si quien busca el talento ajeno, conoce el propio. Es difícil identificar el potencial que cada uno tiene, cuando éste no es evidente.